Sea como sea, este último martes mis preconcepciones sobre los metaleros se vieron destrozadas al atender el primer tour organizado por la revista Decibel. Nunca he visto una audiencia tan pasiva y amigable (cero pogo) y con excepción del cerdo hijoeputa que estaba parado a mi costado durante el set de The Devil's Blood y de la bartender anoréxica que me miro con cara de culo y me dijo que me espere después de que yo le pegara un grito para que me sirva otro ron con Coca Cola, todo estuvo de puta madre.
Bueno, todo, descontando el hecho de que me perdí el set de In Solitude, una de las tres de cuatro bandas que quería ver en vivo.
Como buen latino que soy llegue al local del concierto pasadas las 8 de la noche. Antes me detuve en un bar donde tenían un especial de cervezas 2x1 y racionalice que así evitaba hacer cola. Cuando entre al local del concierto estaba casi abarrotado (98% hombres) y en el escenario en frente de la banderola con el triangulo invertido de The Devil's Blood se encontraban los miembros de la misma banda probando sus instrumentos. Luego de darle una fugaz visita a las letrinas y de informarme de un gordito que meaba a mi costado de que In Solitude ya habían tocado y que lo habían hecho de puta madre, procedí a acercarme tanto como pude al escenario.
Diez minutos después salieron los miembros de The Devil's Blood y empezaron a tocar sus harmoniosos y casi poperos temas. Primero hubo un intro y estoy seguro que debe de haber dejado una impresión en aquellos que desconocían a esta banda holandesa. No tanto por la música sino más que nada por el aura seria y embrujada que despedía esta gente. Todos los miembros de The Devil's Blood estaban cubiertos en sangre de cerdo y los ojos tenían fijamente clavados en todo y en nada. Es decir, miraban hacia las paredes y lo hacían fijamente, levantaban sus brazos como saludando no al público, sino a su ser supremo, hacían el signo de los cuernos y algunos del publico respondian como hipnotizados.
De mi lado estaba Selim Lemouchi, el guitarrista y principal escritor de la banda, cuya falta de camiseta dejaba caer su panza mondonguera por encima de sus pantalones de cuero. Mirando este show y sintiendo las notas de bajo que enganchan el ritmo del primer tema "In the Wings of Gloria" yo solo pensaba que esta era la banda que yo había querido ver en vivo desde la primera vez que escuche su EP debut Come Reap, aquel genial esfuerzo que los convirtió inmediatamente en una de mis bandas favoritas.
Unos minutos más tarde y con la gente ya calentada tras el intro y las primeras notas
del tema mencionado salió al escenario F. The Mouth of Satan, hermana de Selim y dueña de una figura voluptuosa que bordea en el sobrepeso. Manchada de sangre e invocando a algún diablo que parecía estar en el techo, The Mouth of Satan mantuvo
sus brazos extendidos hacia arriba en alabanza a Satanás durante casi toda su
presentación. Su voz era limpia y harmoniosa, propia de un ángel caido.
De rato en rato yo voltebaba para mirar la reacción de la gente. Quería saber si todo el mundo la estaba pasando
tan bien como yo. Al menos 90% del publico estaban ahí por Behemoth, la única
banda del tour que no me interesaba, y por eso, y por la falta de brutalidad en
la música de The Devil's Blood, la mayor parte del publico parecía indiferente. Alguien que no se mantuvo indiferente a la música de The Devil's Blood fue el cerdo hijoeputa que estaba parado a mi derecha con su grupete de amigos. Claramente allí por Behemoth, Porky hacia bailesillos burlones al compas de las
odas a Satanás mas infecciosas que ninguna banda ha creado. Yo lo quería estampar contra el piso y bailar tap en sus orejas, quería que se lo cache un burro, quería que Selim Lemouchi lo castre y que luego se bañe con la sangre que su pene chorrea o que F. The Mouth of Satan con una próstesis de dildo se la meta por la boca, estilo deep throat.
Hubieron un par de fallas en el set de The Devil's Blood; ritmos que parecieron perderse y notas que F. The Mouth of Satan no pudo alcanzar. A mi lo que más me jodio fue que no tocaron "The Heaven's Cry Out for the Devil's Blood", su obra maestra. Mientras tocaban "Fire Burning" una de las gemas de su ultimo álbum, F. The Mouth of Satan salio del escenario de modo indiferente. Yo pensé que se estaba tomando un break, o que quizás le dio un poco de hambre y le fue a dar un mordisco a la hamburguesa que había dejado tibia en el backstage, pero eso fue todo. The Devil's Blood
me dejaron queriendo más, mucho más.
Un ron con Coca Cola y una meada más tarde y Watain estaban en el escenario. Ayudando en las guitarras estaba el mismo Selim Lemouchi y en el bajo el chileno Alvaro Lillo con una pinta y unas expresiones faciales que aun me estriñen.
Debo admitir que desde que vi las fotos promocionales de Lawless Darkness en las que Erik Danielsson porta esos lentes de contacto a la Marilyn Manson, me pareció que Watain estaban cruzando una raya hacia una estética demasiado trabajada. Su música por otro lado, denota una calidad y una atención al detalle admirable. En vivo, con candelabros y velas encendidas, con humo por el suelo, pájaros muertos colgados de la correa de Danielsson y con cruces invertidas gigantes y un sonido impecable me parecieron simplemente acojonantes.
Cualquier persona que se exponía al black metal por primera vez esa noche pensaría que el black metal es música elaborada y casi teatral, donde la pantomima ayuda y no es objeto de burla, donde el ambiente representa verdaderamente la filosofia y las intenciones. Que lo-fi, ni que ocho cuartos, Watain tocan black metal de un modo profesional y esa noche, si en atención habían unos que no los conocían, apostaría mis dos bolas a que salieron del show convertidos al fanatismo de la banda.
Era mi intención marcharme luego del set de Watain, pero como me perdí a In Solitude decidí escuchar un poco de Behemoth. Los polacos si eran dueños del escenario entero, el resto de bandas habían hecho uso de solo la mitad. Yo me fui hacia el bar un rato a descansar y note a mi derecha a David Vincent de Morbid Angel. El tío parece hidrocefalico, tiene una cabezota que intentaba asolapar con un sombrero negro de vaquero y con unas botas típicas de cantante de música country. Rodeandolo estaban un par de miembros de Watain.
Luego Behemoth empezaron a tocar y el público se volvió loco. Me imagine al gordo hijueputa saltando como una pelota que rebota. Esta banda nunca me ha interesado. La primera vez que escuche "Slaves Shall Serve" me causo gracia y sinceramente me pareció una huevada, así que nunca me moleste en escuchar sus discos. Para entonces eran casi las once y media y yo andaba cagado del hambre. Después del primer tema, Nergal grito, 'it's good to be alive', en referencia al Cáncer que acaba de vencer y la gente le respondió con amor; con gritos, con saltos y sin pogueo, con cuernos en sus dedos y con los brazos en alto. Yo ya estaba con hambre y no dejaba de pensar en que si quería comer algo de pizza tendría que salir del concierto antes de la medianoche.
Disculpen la baja fidelidad de las fotos pero culpen a Steve Jobs, porque la camara del iPhone vale verga.
6 comentarios:
El concierto se ve que estuvo bueno y tu descripción es muy entretenida, la verdad, es un cague de risa. Bueno, del show ¿qué te puedo decir?, al no estar leo lo que pones y me parece bien. Pero la primera observación me sorprende. Yo creo que los metaleros, al ser millones hoy en día, no pueden ser mayoritariamente tipos inteligentes e instruidos, la mayoría de la gente ha sido estupidizada (o se ha dejado estupidizar, valgan verdades) desde niña así que por ahí no podemos ser una excepción. Pero también es cierto que cada vez hay más gente inteligente y preparada. Por ejemplo, en la Universidad en la que trabajo, conozco varios metaleros estudiando profesionalmente Historia, Filosofía, Ciencias Politicas y Antropología. Carreras eminentemente reflexivas y de lectura. Tú mismo se nota que eres una persona pensante e instruida (aunque me choca que no pongas tildes, pero es tu elección), como Franco Boggiano o Pino o los hermanos Cerrón Palomino. Yo mismo, si sirvo de ejemplo, soy profesor de filosofía en esa universidad. Creo que otro tanto pasa en el mundo. Sé que estamos hablando de algunos cientos en total contra millones que beben cervezas, son racistas y que, como dices, reúnen característcas que vuelven repugnante a alguien. Pero así es todo grupo humano. Es más entre los metaleros creo que baja un poco eso con respecto de otros grupos más degradados y ridículos todavía. El elgir el heavy metal y sus variantes como un opción estética es ya algo en medio de una sociedad autocomplaciente donde nadie investiga ni busca nada. Saludos.
César
Aja, excelente que te haya gustado Cesar.
La falta de tildes es cuestion de flojera. Cuando comence el blog no sabia como ponerlas puesto que mi teclado no tiene tildes. Las tiene pero solo si uso una formula. En fin, es una excusa pero es cierto. Aunque imagino que deberia de empezar a usar algun programa de Word que pone tildes automaticamente.
Asi es, grupetes repugnantes hay en todos lados. Aunque en el medio oeste americano y entre los fanes de Pantera esa gente parece abundar. Jaja, solo mencionaba eso, porque me sorprendio lo relajada que era la audiencia en este show de Decibel.
Si ves el nuevo video de Pantera, que han sacado sobre un tema de la reedición del VDOP, llamado Piss, se ve a ese onda de metaleros W.A.S.P. bien red necks, viejones la mayoría y con bermudas negras dándose golpes y pogueando entre ellos en cámra lenta. Tratan de transmitir la idea de headbanger violento, agresivo que le gusta dar tundas antes que escuchar la música que le gusta.
asi es..antes que la musica viene toda esta rabia y la descarga de violencia. Y rednecks precisamente...terrible audiencia.
gran review y totalmente deacuerdo la camara del iphone vale verga
eso es lo malo de las personas en los conciertos donde se encuentran bandas por así decirlo nuevas o que no muchos conocen, la gente no se deja llevar por la música, no poguea no hace nada, no se mueven. Mientras no vean a una banda famosa, conocida tipo slayer o cannibal corpse no harán nada. Yo me encontré con el flyer de e del decibel tour y al igual que tu quería hacer cualquier cosa por ver a esas 3 bandas, a behemoth también me agradan un poco su música pero no me causa tanta emoción como watain, in solitude y en especial the devil's blood. En fin buen review.
Publicar un comentario